El lanzador
de disco polaco ha decidido desprenderse de su plata para recaudar fondos para
el pequeño
Después de
que Malachowski ganase la medalla de plata en los Juegos de Río de este año,
una mujer se puso en contacto con él. El motivo no era felicitarlo por su
actuación, ni hablarle como fan, sino pedir auxilio: su hijo, Olek Szymanski,
tiene un cáncer en el ojo, una dolencia contra la que lleva más de la mitad de
su vida luchando y para la que no hay tratamiento en Polonia. Por ello, la
desesperada madre acudía a Malachowski, con la intención de que contribuyese a
salvarlo.
Tras
enterarse del caso, el atleta no se lo pensó dos veces. Rápidamente, decidió
subastar el galardón que había obtenido para colaborar en la recaudación de
fondos, los 112.000 euros que la familia necesita para financiar el tratamiento
del niño en la clínica oftalmológica oncológica David Abramson de Estados
Unidos. «En Polonia no hay ninguna oportunidad para salvarle. La única
oportunidad es recibir terapia en Nueva York», aseguró el deportista en un post
en Facebook, añadiendo que ayudar a Olek es la mejor forma de aumentar la categoría
de su insignia, «ganar una medalla olímpica es un sueño cumplido para un
atleta. Por supuesto, el más preciado es el oro. Hice todo lo posible para
conseguirlo. Lamentablemente esta vez no funcionó. Pero el destino me dio una
oportunidad para aumentar el valor de mi 'Plata'»,