El Barça comunica a Neymar que se planta, que su oferta
económica
es ya inamovible. El club azulgrana no le ha dado un
ultimátum pero sí le ha avisado que tiene ya la última Las conversaciones que
el representante del Barça Raül Sanllehí mantiene con Neymar y su padre en
Brasil han llegado a un punto límite en el que es imposible avanzar más,
esencialmente porque ya no hay más argumentos que debatir sobre la mesa. El
escenario dispone de todos sus elementos y el crack brasileño tiene la última
palabra. De lo que él decida, en el Camp Nou actuarán. O acepta las condiciones
pactadas y retocadas a lo largo de estos meses o toma la decisión de cambiar de
aires previo pago de la cláusula de 190 millones de euros. Quedarse con el
contrato actual es una opción que nadie contempla.
Neymar y su entorno lo saben bien. Lo han escuchado de una
forma muy clara de los interlocutores enviados por el club azulgrana. ‘Es lo
que hay, no hay más’, le habrían dicho. La voluntad y prioridad culé es que se
quede y se lo han repetido en numerosas ocasiones. Sanllehí ha tratado de
convencerle no solo a nivel económico con una propuesta que ronda los 15
millones de euros netos durante las seis próximas temporadas, hasta junio de
2022, sino también con motivos deportivos e institucionales. Le han hecho ver
que está en el club ideal para que su juego pueda explotar en su máxima
expresión y que está rodeado de jugadores que pueden convertirle en número uno del
mundo. A nivel institucional hay por delante el proyecto de la inauguración del
Nou Camp Nou para la temporada 2021-2022 y que el Barça le quiere convertir en
uno de sus estandartes .
De dinero, no hay mucho más de que hablar. Saben que con el
París SG no pueden competir. Los 25 millones de euros limpios es una cifra
inalcanzable e inasumible. Son 10 más por año de lo que percibiría quedándose.
Hasta el Manchester United supera la cifra del Barça
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